Como estudiantes que creemos y reafirmamos que la lucha de clases es la base de los cambios sociales, y que por lo tanto existen clases explotadoras y explotadas es que declaramos tomar posición por las clases oprimidas y explotadas de nuestra sociedad y por la ideología del proletariado el marxismo leninismo maoísmo, principalmente el maoísmo como mando y guía de la revolución, considerando su carácter de universal pero aplicable de acuerdo al contexto. De acuerdo a esto, afirmamos que Chile es un país atrasado como el resto de los países de Latinoamérica y del tercer mundo, es decir, un país semifeudal y semicolonial con capitalismo burocrático (capitalismo generado y dependiente del imperialismo, principalmente el yanqui), por lo que, de acuerdo a esto, la revolución debe ser por etapas y desde el campo a la ciudad desarrollando primero la revolución democrática nacional (con la participación de todas las clases explotadas bajo la dirección del proletariado en contra de las clases explotadoras generadas a imagen y semejanza del imperialismo) previo a la revolución socialista en donde será instaurada la dictadura del proletariado y se llevarán acabo las revoluciones culturales hasta llegar al comunismo. Para entender esto es necesario especificar el rol que juegan las clases en un país como este, donde las cuatro clases explotadas (proletariado, campesinado, pequeña burguesía y el ala democrática de la mediana burguesía) en la primera etapa de la revolución juegan un papel significativo en la lucha contra los terratenientes y burgueses .
Es en este sentido que creemos que el papel que juega la pequeña burguesía y su sector de intelectuales en formación, los estudiantes, es una parte fundamental en las luchas populares y por lo tanto es una herramienta esencial para la construcción de movimiento popular, tomando en cuenta siempre que si bien existe una extracción de clase pequeño burguesa, también existe una posición de clase que nos llevará a asumir la ideología del proletariado y luchar junto a las clases explotadas en la revolución democrática nacional primera tarea para alcanzar el comunismo.
Creemos que es necesario elevar el nivel de consciencia de los estudiantes formando una organización que tenga un carácter de clase que tome posición por los sectores más golpeados y explotados dentro de las universidades y los liceos y este ligado estrechamente a las masas, respetando siempre su voluntad pero sin caer en seguidismos.
Para conseguir esto es que comenzaremos por los problemas concretos que nos aquejan como estudiantes, comenzando con luchas reivindicativas pasando así de lo económico a lo político uniendo así teoría y práctica y dejando siempre en claro que nuestras reivindicaciones no son más que una expresión del modelo educacional que busca perpetuar el Viejo Estado. Para esto debemos crear un programa de lucha que reúna a las universidades y los liceos con una línea política general y que sea especificada en los distintos contextos estudiantiles.
Buscamos crear y consolidar una organización que tenga como motor la lucha de dos líneas, que tenga crítica y autocrítica, es decir que aprenda de sus errores pasados y saque lección de ellos, organizándonos bajo el principio del centralismo democrático para así avanzar por una democratización de los centros de estudios teniendo voz y voto en las decisiones atacando las políticas de externalización de los servicios, exigiendo buenas estructuras, denunciando las persecuciones políticas hacia los estudiantes y en general ser actores principales a través de un cogobierno para así poner a la educación al servicio de la revolución asumiendo siempre que nuestra entrega debe estar impregnada por un carácter de clase que nos diferencia de los sectores estudiantilistas oportunistas y revisionistas que son enemigo principal en el seno del pueblo y expresión de la burguesía en el pueblo, que se acomodan a la explotación y llevan a los estudiantes a fracasar y desilusionarlos alejándose después de la lucha.
Declaramos que nuestra lucha como intelectuales en formación es en pos de un proceso mayor en el cual estamos del lado de las clases oprimidas para conseguir el triunfo final de estas sobre esa minoría explotadora, hasta conseguir una sociedad sin clases, es decir, el comunismo.