Gratuidad implica universidades estatales
gratuitas, vale decir donde no existen precios de aranceles ni por carrera ni
por ingreso, no hay cobros de matrícula ni título y cualquiera que quiera ingresar puede hacerlo saliendo de cuarto
medio, sin que existan pruebas de selección como la PSU. ¿Esto es lo que plantea el
gobierno? NO, todo lo contrario, su proyecto tiene dos aristas: financiar al negocio
educativo de los mafiosos que controlan las universidades, e intentar destruir
la verdadera lucha del movimiento estudiantil.
La primera arista es que por medio de aportes por “gratuidad”
traspasarán sumas millonarias a quienes controlan las universidades sean las
estatales, como las tradicionales y privadas que acepten constituirse como “corporaciones
sin fines de lucro”. En el caso de las estatales esto beneficiará los bolsillos
de los mafiosos y corruptos que a costa de los cobros a los estudiantes y los convenios que tienen con las grandes
empresas y terratenientes, han sacado ganancias para sus propias empresas
“vinculadas” (como FUDEA y la inmobiliaria de la UFRO), mientras que los
grandes empresarios del sector “tradicional” y privado utilizaran las
corporaciones para incrementar sus ganancias, pues han sido creadas por estos
para lavar dinero y ganar más sin invertir de sus propios bolsillos, el Viejo Estado
es quien lo hará por ellos. ¿Y la
eliminación de los aranceles? Eso para el gobierno no es tema, es más, estos
seguirán subiendo junto a los cobros adicionales. Para la masa crecerán las
condiciones precarias. Eso del arancel “regulado” y el ajuste del arancel referencial
es un acomodo a las reglas del mercado educativo y quienes lo controlan: las
grandes corporaciones y grupos económicos. Lo que ocurre es que hay diversos
sectores disputándose por quien recibe la mejor parte del botín, por eso pugnan
entre los que dirigen las estatales, con las tradicionales y ambos a su vez con
las privadas. Ellos quieren usarnos como carne de cañón para sus intereses, nosotros
debemos luchar por los nuestros, que son del pueblo, pues las universidades y
sus autoridades bajo el poder de las clases explotadoras solo sirven para la
aplicación de sus planes económicos y políticos.
La segunda arista es que quieren destruir la lucha por las verdaderas
demandas del movimiento estudiantil. Su “gratuidad” obliga a quienes tengan la
beca a no atrasase con su carrera, vale decir, además de falsa es una soga al
cuello porque una buena parte de los estudiantes no pueden realizar esto debido
a las condiciones precarias de estudio. Pero todo tiene un objetivo:
chantajearnos y presionarnos para hacernos creer cosas como estas: ¿Cómo me voy
a movilizar si después me atraso con mi carrera y pierdo la “gratuidad”?, eso
es manipular usando la pobreza de nuestro pueblo. También difunden que la gratuidad
ya se conquistó y que ya no hay que luchar por ella, si no por “afinar el
proyecto” y “defenderlo en el congreso”. Por eso hablaron primero que era para
el 60% de los “más vulnerables” y ahora el 50% (que no es lo mismo que el 50%
del pueblo pues ellos clasifican la pobreza en varios estratos “vulnerables”),
pues buscan arrastrarnos tras su reforma y sus pugnas por el mercado,
desviándonos de la verdadera lucha del movimiento estudiantil.
Pero no pueden solos, el gobierno ha convocado al
revisionismo de las JJCC junto a toda la cloaca oportunista para cumplir sus
objetivos. Son los mismos que el 2011 vendieron la lucha por la gratuidad cambiándola
por “aportes basales” para los rectores y su “no al lucro” útil para las
grandes corporaciones educativas. La incorporación del falso partido comunista
al gobierno responde al plan imperialista para frenar la lucha popular y
conducir al pueblo de manera forzada hacia la contrarrevolución. Todas sus
reformas apuntan a lo mismo: profundizar el capitalismo burocrático,
reestructurar el Viejo Estado y prevenir una Guerra popular incrementando el
fascismo, lo que implica corporativizar al pueblo con demagogia por un lado y
la represión sangrienta por otro. Tras ellos han convocado organizaciones
electoreras como la “izquierda autónoma”,
junto a los UNE y el FEL. Pero como todos esos intentos han fracasado, porque la
masa estudiantil rechaza la patraña electoral, la reacción utiliza al otro oportunismo
siempre colaborador, ese que oculta su electoralismo y que se muestra de boca
más a la izquierda que el resto, con quienes en los hechos trabajan de la mano
en coordinadoras de vendidos, apaciguado la protesta popular y bajando
movilizaciones por migajas, nos referimos al MIR y sus amarillos colectivos
universitarios.
Nada de esto nos debe detener. La lucha continúa,
hay que levantar las demandas internas y atacar la gran estafa del gobierno y el
oportunismo. Los aranceles van a subir, la vendida federación saliente ya lo
firmó. Hay que luchar por la reducción de estos, por las demandas pendientes y contra
los negociados de las autoridades. Ninguna federación como estas lo harán, sus
dirigentes están comprados. El destino es combatir.
¡APLASTAR LA FALSA GRATUIDAD!
¡IMPULSAR LA LUCHA POR LAS DEMANDAS!
F.E.R.
Frente Estudiantil Revolucionario